Translate

lunes, 12 de junio de 2017

La Vanidad

En esta ocasión les hablaremos de la vanidad en el hombre lo ordinario que lo hace ver el mundo y lo mala que es y cuanto daño hace en las pequeñas cosas de cada día. Este libro atribuido a Salomón un rey que todo lo tuvo y sin embargo siempre estuvo vacío y así también terminó.


¡Vanidad, pura vanidad!, dice Cohélet.
¡Vanidad, pura vanidad! ¡Nada más que vanidad!¿Qué provecho saca el hombre
de todo el esfuerzo que realiza bajo el sol?

Ecl 1,2-3


En esta introducción, Salomón nos da el resumen y la idea principal de todo su discurso, al cual habla de vanidad en todos los aspectos de la vida del hombre.


Yo, Cohélet,
he sido rey de Israel, en Jerusalén,y me dediqué a investigar y a explorar con sabiduría
todo lo que se hace bajo el cielo:
es esta una ingrata tarea
que Dios impuso a los hombres
para que se ocupen de ella.
Así observé todas las obras que se hacen bajo el sol,
y vi que todo es vanidad y correr tras el viento.



En este párrafo, el escritor nos dice que la ciencia y sabiduría que él se dedicó a buscar a lo largo de su vida, fue al final banal, pues realmente muchos frutos de nuestros trabajos ni siquiera vivimos para disfrutarlos, pensemos en aquellos investigadores que pasan toda su vida tratando de encontrar pequeños descubrimientos, de los cuales ellos mismos no se benefician (de una forma buena), y que la humanidad realmente no necesita, en lugar de haber sido felices en su vida, y disfrutar de las pequeñas cosas, buscan ser admirados por gente extraña, y no tanto el bienestar de las personas que realmente les corresponderían, a esto le llamamos vanidad, pues aparte de ser pasajero, sólo se hace buscando el propio prestigio y no genuinamente el verdadero bienestar que debería empezar por la familia.


Ecl 1, 16-17


Si la sabiduría viene de Dios que la hace vanidad? en si no lo es pero para lo que el hombre la usa la convierte en eso, porque se vuelve en algo acumulable  que es bien visto a los ojos del mundo y que no contribuye ni al verdadero amor ni a la superación verdadera de la persona y muchas veces solo se le llama sabiduría a inteligencia o conocimiento de cosas pasajeras o inútiles, adémas el hombre en esta búsqueda emplea su dinero, tiempo y esfuerzo y no olvidemos que dónde ponemos nuestro tesoro esta también nuestro corazón, y no podemos servir a dos patrones.




Aquí el sabio nos cuenta como muchos de nosotros ya lo sabemos, que el placer y la diversión resultan vanos y vacíos, cuando se convierten en el centro de nuestra vida, porque éstos deben ser más bien un complemento, mientras se hagan con templanza y correctamente, ayudan y enriquecen al hombre en su camino a la felicidad.





En primer lugar se nos habla sobre las grandes construcciones que dedicó su tiempo y esfuerzo en levantar. La pregunta es ¿Para qué lo hizo? Si analizamos el texto nos damos cuenta que son obras con las que buscaba satisfacer su vanidad y orgullo ("Me construí...." y "grandes obras") pues si en cambio hubieran sido para ayudar a los demás habrían sido algo más que vanidad. 
En segundo lugar se nos habla de una acaparamiento de recursos e incluso personas lo que nos indica claramente una injusticia (aunque en ese tiempo no se veía así pues la esclavitud era algo normal), también hace énfasis en el haber tenido más que TODOS los anteriores lo que otra vez nos indica que ésto es propio del orgullo y vanidad en el hombre.
Por último nos habla sobre los placeres carnales que tenía. Si hemos estudiado la biblia, podemos saber que Salomón corrompió su corazón ante Dios por causa de sus mujeres que lo incitaron a adorar a otros dioses (estatuas), y fue por causa de ello que Dios lo castigó quitándole su Reino. Además podemos agregar lo que nos dice San Pablo en su carta: "Que los deseos de la carne tales como ambiciones, envidias, discordias, lujuria, etc... son contrarios a los del Espíritu que claman a Dios como nuestro Padre y que nos llevan a la vida eterna, por el contrario, los deseos de la carne nos llevan a la muerte CORPORAL y espiritual" (el pecado necesariamente te lleva a la muerte, incluso una muerte prematura). 

...

...

...

...

...


...


...

5

7 Luego volví mis ojos
a otra cosa vana bajo el sol:
8
 un hombre está completamente solo,
no tiene hijo ni hermano,
pero nunca pone fin a su esfuerzo
ni se sacia de ambicionar riquezas.
Entonces, ¿para quién me esfuerzo
y me privo del bienestar?
También esto es vanidad y una tarea ingrata.








En este mundo he visto algo más que no son los veloces los que ganan la carrera ni los valientes los que ganan la batalla; que no siempre los sabios tienen pan, ni los inteligentes son ricos, ni los instruidos son bien recibidos;todos ellos dependen de un momento de suerte.




12,13-14















No hay comentarios:

Publicar un comentario