En esta ocasión les hablaremos de la vanidad en el hombre lo ordinario que lo hace ver el mundo y lo mala que es y cuanto daño hace en las pequeñas cosas de cada día. Este libro atribuido a Salomón un rey que todo lo tuvo y sin embargo siempre estuvo vacío y así también terminó.
¡Vanidad, pura vanidad!, dice Cohélet.
¡Vanidad, pura vanidad! ¡Nada más que vanidad!¿Qué provecho saca el hombre
de todo el esfuerzo que realiza bajo el sol?
Yo, Cohélet,
he sido rey de Israel, en Jerusalén,y me dediqué a investigar y a explorar con sabiduría
todo lo que se hace bajo el cielo:
es esta una ingrata tarea
que Dios impuso a los hombres
para que se ocupen de ella.Así observé todas las obras que se hacen bajo el sol,
y vi que todo es vanidad y correr tras el viento.
7 Luego volví mis ojos
a otra cosa vana bajo el sol:
8 un hombre está completamente solo,
no tiene hijo ni hermano,
pero nunca pone fin a su esfuerzo
ni se sacia de ambicionar riquezas.
Entonces, ¿para quién me esfuerzo
y me privo del bienestar?
También esto es vanidad y una tarea ingrata.
¡Vanidad, pura vanidad!, dice Cohélet.
¡Vanidad, pura vanidad! ¡Nada más que vanidad!¿Qué provecho saca el hombre
de todo el esfuerzo que realiza bajo el sol?
Ecl 1,2-3
En esta introducción, Salomón nos da el resumen y la idea principal de todo su discurso, al cual habla de vanidad en todos los aspectos de la vida del hombre.
he sido rey de Israel, en Jerusalén,y me dediqué a investigar y a explorar con sabiduría
todo lo que se hace bajo el cielo:
es esta una ingrata tarea
que Dios impuso a los hombres
para que se ocupen de ella.Así observé todas las obras que se hacen bajo el sol,
y vi que todo es vanidad y correr tras el viento.
En este párrafo, el escritor nos dice que la ciencia y sabiduría que él se dedicó a buscar a lo largo de su vida, fue al final banal, pues realmente muchos frutos de nuestros trabajos ni siquiera vivimos para disfrutarlos, pensemos en aquellos investigadores que pasan toda su vida tratando de encontrar pequeños descubrimientos, de los cuales ellos mismos no se benefician (de una forma buena), y que la humanidad realmente no necesita, en lugar de haber sido felices en su vida, y disfrutar de las pequeñas cosas, buscan ser admirados por gente extraña, y no tanto el bienestar de las personas que realmente les corresponderían, a esto le llamamos vanidad, pues aparte de ser pasajero, sólo se hace buscando el propio prestigio y no genuinamente el verdadero bienestar que debería empezar por la familia.
Ecl 1, 16-17
Si la sabiduría viene de Dios que la hace vanidad? en si no lo es pero para lo que el hombre la usa la convierte en eso, porque se vuelve en algo acumulable que es bien visto a los ojos del mundo y que no contribuye ni al verdadero amor ni a la superación verdadera de la persona y muchas veces solo se le llama sabiduría a inteligencia o conocimiento de cosas pasajeras o inútiles, adémas el hombre en esta búsqueda emplea su dinero, tiempo y esfuerzo y no olvidemos que dónde ponemos nuestro tesoro esta también nuestro corazón, y no podemos servir a dos patrones.
goza del bienestar”.
Pero también esto es vanidad.De la risa, dije: “No es más que locura”,
y de la alegría: “¿Para qué sirve?”.Decidí estimular mi carne con el vino,
manteniendo la mente lúcida,
y dejarme llevar de la insensatez,
hasta ver qué les conviene
hacer a los hombres bajo el cielo,
en los contados días de su vida.
Pero también esto es vanidad.De la risa, dije: “No es más que locura”,
y de la alegría: “¿Para qué sirve?”.Decidí estimular mi carne con el vino,
manteniendo la mente lúcida,
y dejarme llevar de la insensatez,
hasta ver qué les conviene
hacer a los hombres bajo el cielo,
en los contados días de su vida.
Aquí el sabio nos cuenta como muchos de nosotros ya lo sabemos, que el placer y la diversión resultan vanos y vacíos, cuando se convierten en el centro de nuestra vida, porque éstos deben ser más bien un complemento, mientras se hagan con templanza y correctamente, ayudan y enriquecen al hombre en su camino a la felicidad.
me construí mansiones y planté viñedos;me hice jardines y parques,
y planté allí toda clase de árboles frutales;me fabriqué cisternas, para regar el bosque donde crecían los árboles;compré esclavos y esclavas,
y algunos me nacieron en casa;
poseí también ganado en abundancia,
más que todos mis predecesores en Jerusalén.Amontoné además plata y oro,
y tesoros dignos de reyes y de provincias;
me conseguí cantores y cantoras,
y muchas mujeres hermosas,
que son la delicia de los hombres.
y planté allí toda clase de árboles frutales;me fabriqué cisternas, para regar el bosque donde crecían los árboles;compré esclavos y esclavas,
y algunos me nacieron en casa;
poseí también ganado en abundancia,
más que todos mis predecesores en Jerusalén.Amontoné además plata y oro,
y tesoros dignos de reyes y de provincias;
me conseguí cantores y cantoras,
y muchas mujeres hermosas,
que son la delicia de los hombres.
En primer lugar se nos habla sobre las grandes construcciones que dedicó su tiempo y esfuerzo en levantar. La pregunta es ¿Para qué lo hizo? Si analizamos el texto nos damos cuenta que son obras con las que buscaba satisfacer su vanidad y orgullo ("Me construí...." y "grandes obras") pues si en cambio hubieran sido para ayudar a los demás habrían sido algo más que vanidad.
En segundo lugar se nos habla de una acaparamiento de recursos e incluso personas lo que nos indica claramente una injusticia (aunque en ese tiempo no se veía así pues la esclavitud era algo normal), también hace énfasis en el haber tenido más que TODOS los anteriores lo que otra vez nos indica que ésto es propio del orgullo y vanidad en el hombre.
Por último nos habla sobre los placeres carnales que tenía. Si hemos estudiado la biblia, podemos saber que Salomón corrompió su corazón ante Dios por causa de sus mujeres que lo incitaron a adorar a otros dioses (estatuas), y fue por causa de ello que Dios lo castigó quitándole su Reino. Además podemos agregar lo que nos dice San Pablo en su carta: "Que los deseos de la carne tales como ambiciones, envidias, discordias, lujuria, etc... son contrarios a los del Espíritu que claman a Dios como nuestro Padre y que nos llevan a la vida eterna, por el contrario, los deseos de la carne nos llevan a la muerte CORPORAL y espiritual" (el pecado necesariamente te lleva a la muerte, incluso una muerte prematura).
9 Llegué a ser tan grande,
que superé a todos mis predecesores en Jerusalén.
Sin embargo, la sabiduría permanecía siempre conmigo.
que superé a todos mis predecesores en Jerusalén.
Sin embargo, la sabiduría permanecía siempre conmigo.
18 Y también detesté todo el esfuerzo
que había realizado bajo el sol,
y que tendré que dejar al que venga después de mí.
19 ¿Y quién sabe si él será sabio o necio?
Pero será el dueño de lo que yo he conseguido
con esfuerzo y sabiduría bajo el sol.
También esto es vanidad.
20 Y llegué a desesperar
de todo el esfuerzo que había realizado bajo el sol.
21 Porque un hombre que ha trabajado
con sabiduría, con ciencia y eficacia,
tiene que dejar su parte
a otro que no hizo ningún esfuerzo.
También esto es vanidad y una grave desgracia..
que había realizado bajo el sol,
y que tendré que dejar al que venga después de mí.
19 ¿Y quién sabe si él será sabio o necio?
Pero será el dueño de lo que yo he conseguido
con esfuerzo y sabiduría bajo el sol.
También esto es vanidad.
20 Y llegué a desesperar
de todo el esfuerzo que había realizado bajo el sol.
21 Porque un hombre que ha trabajado
con sabiduría, con ciencia y eficacia,
tiene que dejar su parte
a otro que no hizo ningún esfuerzo.
También esto es vanidad y una grave desgracia..
y todo lo que busca afanosamente bajo el sol?
23 Porque todos sus días son penosos,
y su ocupación, un sufrimiento;
ni siquiera de noche descansa su corazón.
También esto es vanidad.
23 Porque todos sus días son penosos,
y su ocupación, un sufrimiento;
ni siquiera de noche descansa su corazón.
También esto es vanidad.
es comer y beber,
y pasarla bien en medio de su trabajo.
Yo vi que también esto viene de la mano de Dios.
25 Porque ¿quién podría comer o gozar
si no es gracias a él?
26 Porque al que es de su agrado
él le da sabiduría, ciencia y alegría;
al pecador, en cambio, lo ocupa en amontonar y atesorar
para dárselo al que agrada a Dios.
También esto es vanidad y correr tras el viento.
y pasarla bien en medio de su trabajo.
Yo vi que también esto viene de la mano de Dios.
25 Porque ¿quién podría comer o gozar
si no es gracias a él?
26 Porque al que es de su agrado
él le da sabiduría, ciencia y alegría;
al pecador, en cambio, lo ocupa en amontonar y atesorar
para dárselo al que agrada a Dios.
También esto es vanidad y correr tras el viento.
10 Yo vi la tarea que Dios impuso a los hombres
para humillarlos con ella.
11 Él hizo todas las cosas apropiadas a su tiempo,
pero también puso en el corazón del hombre
el sentido del tiempo pasado y futuro,
sin que el hombre pueda descubrir
la obra que hace Dios desde el principio hasta el fin.
para humillarlos con ella.
11 Él hizo todas las cosas apropiadas a su tiempo,
pero también puso en el corazón del hombre
el sentido del tiempo pasado y futuro,
sin que el hombre pueda descubrir
la obra que hace Dios desde el principio hasta el fin.
...
14 Yo reconocí que todo lo que hace Dios
dura para siempre:
no hay que añadirle ni quitarle nada,
y Dios obra así para que
se tenga temor en su presencia.
dura para siempre:
no hay que añadirle ni quitarle nada,
y Dios obra así para que
se tenga temor en su presencia.
...
4 1 Yo volví mis ojos a todas las opresiones
que se cometen bajo el sol:
ahí están las lágrimas de los oprimidos,
y no hay quien los consuele.
La fuerza está del lado de los opresores,
y no hay nadie que les dé su merecido.
que se cometen bajo el sol:
ahí están las lágrimas de los oprimidos,
y no hay quien los consuele.
La fuerza está del lado de los opresores,
y no hay nadie que les dé su merecido.
...
4 Yo vi que todo el esfuerzo
y toda la eficacia de una obra
no son más que rivalidad de unos contra otros.
También esto es vanidad y correr tras el viento.
y toda la eficacia de una obra
no son más que rivalidad de unos contra otros.
También esto es vanidad y correr tras el viento.
...
5
7 Luego volví mis ojosa otra cosa vana bajo el sol:
8 un hombre está completamente solo,
no tiene hijo ni hermano,
pero nunca pone fin a su esfuerzo
ni se sacia de ambicionar riquezas.
Entonces, ¿para quién me esfuerzo
y me privo del bienestar?
También esto es vanidad y una tarea ingrata.
6 1 Hay un mal que yo he visto bajo el sol
y que resulta muy pesado para el hombre.
2 A uno Dios le ha dado riquezas, posesiones y honores,
y no le falta nada de todo lo que desea.
Pero Dios no le permite disfrutar de eso,
sino que lo disfruta alguien más.
Esto es vanidad y un mal penoso.
y que resulta muy pesado para el hombre.
2 A uno Dios le ha dado riquezas, posesiones y honores,
y no le falta nada de todo lo que desea.
Pero Dios no le permite disfrutar de eso,
sino que lo disfruta alguien más.
Esto es vanidad y un mal penoso.
En este mundo he visto algo más que no son los veloces los que ganan la carrera ni los valientes los que ganan la batalla; que no siempre los sabios tienen pan, ni los inteligentes son ricos, ni los instruidos son bien recibidos;todos ellos dependen de un momento de suerte.
12,13-14
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